Entre el miércoles y el jueves en la madrugada la Cámara de Diputados de la Nación elevará el protagonismo por la discusión de la ley de Presupuesto al Senado, o lo retendrá para sí, en el barro de una cámara cada vez mas baja.
Desde el regreso de la democracia en 1983 todos los gobiernos gozaron de la aprobación en ambas cámaras de sus presupuestos, incluso cuando fueron enviados luego de que ya hayan sido ejecutados, la oposición en mayoría optó por aprobarlo.
En declaraciones al programa La Otra Cara del Patacón que se emite por Radio Universidad (de La Plata ) el Senador Nacional Eric Calcagno sostuvo que el activismo de algunos diputados opositores trasciende los límites de la legalidad que impone la Constitución Nacional. Ya que al Congreso le corresponde aprobar un presupuesto en base al proyecto enviado por el Jefe de Gabinete con la aprobación del Poder Ejecutivo.
El proyecto que emerja del Congreso Nacional podrá sufrir (o gozar) modificaciones, pero en base al programa del Poder Ejecutivo, y no del diputado Alfonso Prat Gay.
“La intención de la oposición no es mejorar un poco o aportar críticas constructivas al proyecto del Gobierno, sino aprobar otro presupuesto”, aseguró Calcagno, y agregó que “si quieren presentar su propio presupuesto que sean Gobierno, que ganen las elecciones”.
Consultado por el rol que protagoniza la dirigencia opositora, el Senador razonó que “la oposición hace teatro del absurdo” y “el arco opositor no resiste el televín, están cinco metros adelantados”.
Si la lógica más llana de las simples mayorías parlamentarias se apoderara de la facultad de definir el Presupuesto Nacional, las consecuencias no sólo impactarían en la arena política, sino también en los cimientos de la economía: la obra pública. En ese sentido, Calcangno sostuvo que “hay 7400 obras públicas que se ejecutan en la Argentina en este momento, y esas obras están en el presupuesto nacional, que el arco opositor no quiera aprobar el presupuesto nacional pone entre paréntesis esas obras públicas”. En una nota escrita por Hernán Brienza para el diario Tiempo Argentino, el periodista detalla que la autovía Puerto Madryn-Trelew se encuentra entre las tantas obras en ejecución que correría algún riesgo.
Según el Senador del FPV-PJ y presidente de la comisión de presupuesto, si se aprobara el proyecto de la oposición, cada una de las 7400 obras debería pasar por el debate parlamentario, lo que generaría un engendro administrativo, ya que implicaría que “el poder legislativo gobierne en un sistema presidencialista”.
Otro aspecto llamativo de la puja política por la Ley de Presupuesto, es que la principal crítica que la oposición se atreve a transmitir al público, es que el Gobierno Nacional subestima las expectativas de crecimiento, para que la recaudación supere las estimaciones presupuestadas; y de ese modo contar con un mayor margen de maniobra en la administración de los recursos públicos. Sin embargo, de no aprobarse el proyecto del oficialismo la única salida institucional es que el Gobierno encare el ejercicio 2011 con el presupuesto de 2010, que es más reducido que el de 2011. De esa manera, el Poder Ejecutivo contaría con un margen de maniobra muy superior, ya que la recaudación superará a la de 2010.
Por su parte, el gobernador Das Neves ya anunció que los diputados que responden a su bloque (dos) votarán en contra del proyecto nacional, por las mismas razones expuestas en el párrafo anterior.
Pero vale recordar, que el radicalismo, con algo de razón, siempre criticó al kirchnerismo por subestimar las expectativas de crecimiento que le permitían contar con más recursos para usar según su propio criterio. Pero en aquel entonces, el Gobernador prefirió que sus diputados voten a favor del proyecto nacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario