sábado, 12 de marzo de 2011

Huracán


La juventud es otra característica que signa los actos del oficialismo. Al finalizar, cuando las columnas se descontracturaron se pudo ver la enorme cantidad de jóvenes que recorrían el campo de juego. Pequeñas agrupaciones de veinte o treinta personas, con remeras y banderas distinguidas, construyen una nueva simbología y retoman íconos que habían sido olvidados o que no pudieron ser, como El Eternauta. En ese tránsito por el campo de juego, la canción Juguetes perdidos de los Redonditos de Ricota sonó a todo volumen, y reconvirtió el acto político en un recital de rock. Pero el himno ricotero no musicalizó la escena distópica de los caóticos recitales de los Redonditos de Ricota: “Banderas en tu corazón, yo quiero verlas ondeando, luzca el sol o no, banderas rojas, banderas negras, de lienzo blanco en tu corazón”, letra y música de un estadio lleno de gente que eligió ser protagonista de los documentales del futuro. “Quiero una juventud que construya su propia historia”, les dijo Cristina.

1 comentario:

  1. x la imagen gracias, tus crónicas como siempre profundas y destellantes de un amor poco común...

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